- La tengo como un tren.
- ¿De grande?
- No se sucia.
- Bombón, tenemos que dejar de vernos.
- Pues apaga la luz cariño…
- Yo tengo dos hermanas increíbles.
- ¿Buenísimas?
- No, ¡mentirosísimas!
- Tengo un hambre bestial, lo malo es que soy vegetariano.

- Yo siempre quise tener cuatro esposas, pero no contaba con las cuatro suegras.
- ¿Es lo mismo tuve que tubo?
- ¿Por qué?
- Porque todo lo que tuve se me fue por un tubo.
- Yo siempre quise tener mucha pasta y ahora tengo un restaurante italiano.
- Pues yo tengo las tetas de Sabrina y de Pamela Anderson.
- ¿Tienes el busto gigante?
- No, tengo cuatro tetas.
- Tú no tienes lo que un hombre ha de tener para conquistar a una mujer.
- ¿un pene grande?
- No, dinero.
- Había un pirata, con una pata de palo, que se llamaba Garfio...
- ¿Y cómo se llamaba la otra pata?
- Pues yo tengo unas piernas buenísimas, son de caoba natural.
- Todo el mundo se empeña en discutir conmigo, y todo porque siempre tengo la razón.